Fin de semana dibujado en la
ciudad de Córdoba. Varios componentes del club nos trasladamos desde el día
antes de la prueba para aprovechar una visita turística al centro de la ciudad
y una cena ofrecida para la organización de la prueba para corredores y acompañantes.
Tras un amanecer algo frío y
nublado, salió el sol para ver a los 4000 corredores que se disponían a
completar los 21 km aproximadamente de esta prueba. Se facilitaba una salida
preferencial para aquellos que lo solicitaran que estaba controlada por
alfombras para chips en salida, meta y zona intermedia. La organización estuvo
de 10, desde el día anterior hasta el final del evento. Existían avituallamientos
de agua cada 5 km más uno de naranjas en los últimos kms. A la recogida del
dorsal se hacía entrega de una bolsa muy completa de obsequios y tras la meta
numerosas bebidas y bocadillos para reponer lo mínimo de energías.
Mi amigo Periko no se había
inscrito por no considerar su forma para cubrir esta distancia pero sí que hizo
varios kms con la cámara a cuestas para fotografiar la carrera desde diferentes
puntos del recorrido y gastar aliento con sus valiosos ánimos.
Disparo de salida con nuestro
paisano Antonio Jesús Pérez del Periver en cabeza. Hizo una buena salida pero
el ritmo de sus acompañante lo sobrepasaron, perdió las buenas sensaciones y
sufrió hasta meta logrando un tiempo de 1:16:59 (a 3,37 el km), que para él
quizás no sea tan bueno pero más de uno quisiéramos acercarnos a esta marca. Su
posición en la general fue la 65ª.
El vencedor de la prueba fue Mournir
Elouardi del Bikila con un tiempo de 1:07:51 (a 3,11 el km). Marcó la
diferencia colocándose en cabeza desde los primeros kms, por algo llevaría el
dorsal nº 1. A éste le siguió el malagueño Miguel Ángel Ruiz del Unicaja a tan
sólo 45 seg. El pódium lo cerró Rafael Bermúdez con un tiempo de 1:09:07 (a
3,14 el km).
En féminas tampoco hubo
sorpresas, fue Nazha Machrouh, también del Bikila, quien venció con un tiempo
de 1:15:43 (a 3,33 el km). Y por algo ella llevaría el dorsal nº 2. En 2ª posición llegó Esther Hidalgo del Club Nerja Atletismo
con 1:18:45 (a 3,42 el km). El pódium lo completó Lourdes González del Unicaja
Jaén con 1:20:20 (a 3,46 el km).
El primer integrante del CA
Chiclana en cruzar la meta fue Manuel Sánchez con un tiempo de 1:31:48 (a 4,18
el km), logrando superar su mejor tiempo. El entrenamiento y empeño que ha
puesto en prepararla tuvo su recompensa, a pesar de sufrir molestias en gran
parte de la carrera. Su posición fue 716ª, aunque el orden no es por tiempo, ya
que con tantos participantes los primeros salían hasta con 3 minutos de ventaja
sobre los últimos
Tras él, nuestro compañero Paco Richarte
consiguió un tiempo de 1:36:25 (a 4,31 el km) en 1190ª posición. Salió en grupo
junto a Jesús, Fran, Manuel y yo, tiró algo más desde el 10º km con Jesús que
dejó de aguantar su ritmo en el 14º y mejoró sensaciones llegando fuerte a meta
sin ninguna molestia de las que le traían de cabeza. Todo un éxito.
Fran y yo hicimos todo el
recorrido juntos. Fuimos muy prudentes por ser la 1ª Media Maratón de Fran. No
tuvimos más remedio que avanzar muy despacio durante el primer kilómetro de
atasco. Nos mantuvimos en el grupo que cité anteriormente hasta el 10º
aproximadamente en el que establecimos un ritmo más constante comenzando una
leve pero larga subida en la que sobrepasamos numerosos corredores que se iban
descolgando. A partir del 15º km Fran seguía sintiéndose muy bien y comenzamos
a progresar cada vez más en el ritmo, de forma que los 2 últimos kms fueron los
más fuertes y llegando con un gran sprint hasta meta con una foto para
enmarcar. En 1316ª y 1317ª posición, nuestro tiempo fue de 1:37:45 (a 4,35 el
km), nueva referencia para Fran.
Jesús nos siguió con un tiempo de
1:39:01 (a 4,39 el km). Seguido de Manuel Ramos que paró el crono en 1:41:19 (a
4,45 el km) en 1640ª posición. Aunque no consiguió su objetivo de bajar el
1h40min se quedó muy cerca. Seguramente lo hará en la próxima.
Fin de la prueba con un bonito
recuerdo y con 3554 corredores al otro lado de la meta. El tiempo fue de
agradecer y eso permitió disfrutar de la multitud de gente en las calles y de
los impresionantes paisajes de esta ciudad como al cruzar el puente sobre el
Río Guadalquivir o al alcanzar una zona desde la que se podía ver a la mezquita
en su ciudad.